Entre Ríos cuenta con un espacio modelo para la conservación de vacunas y logística de entrega

La provincia cuenta con un espacio preparado especialmente para mantener las condiciones de seguridad, la conservación y la distribución de las vacunas, garantizando un derecho fundamental en toda la provincia. La cámara de vacunas es parte de un sistema centrado en la prevención.

La eficiencia de las vacunas depende de asegurar en todo momento la potencia inmunológica de estos productos biológicos sensibles a la temperatura. Por tanto, los protocolos para su recepción, almacenamiento y distribución están absolutamente vinculados al mantenimiento de la cadena de frío y al cumplimiento de normativas específicas.

Desde 2023 la provincia cuenta con su propia cámara de almacenamiento, un edificio nuevo emplazado en calle Ambrosetti de la ciudad de Paraná -en el predio del Hospital Escuela de Salud Mental-, que permite el fácil acceso.

Allí se almacenan las 18 vacunas incluidas en el calendario nacional. También hay equipamientos especiales para dosis indicadas por fuera del calendario nacional que necesitan temperaturas de conservación específicas.

A la fecha, entre las vacunas del calendario nacional y contra el Coronavirus, hay 530.480 dosis almacenadas; mientras que la capacidad total de la cámara asciende a 650.000 dosis (sujeta a las medidas de embalaje de las vacunas).

 

Beneficios del nuevo espacio

La nueva estructura se planificó para centralizar en un solo lugar el manejo de este tipo de insumos, contando así con un ámbito específico, garantizando el cumplimiento de las pautas de seguridad. Además, al contar con un playón y oficinas propias, ha permitido mejorar la logística en relación al recibimiento y expedición de vacunas, agilizar y facilitar la entrega.

Anteriormente, parte del equipo administrativo del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) trabajaba desde las oficinas centrales del Ministerio de Salud de Entre Ríos, ubicadas a media cuadra de la plaza principal de Paraná. El equipo técnico estaba en la cámara de vacunas, que funcionaba debajo del edificio de Vialidad Provincial, a más de 10 cuadras de las dependencias administrativas.

El jefe del PAI, Claudio Niz, destacó que el espacio “tiene capacidad para almacenar el recurso de las vacunas para todo el territorio provincial, que se gestiona a través de la adhesión a los programas de enfermedades inmunoprevenibles de Salud de la Nación y se articula en la provincia. Esto permite tener las dosis y mantener el control sobre el stock disponible, para garantizar luego la distribución y la llegada a término de esos insumos a los hospitales y centros de salud”.

“Todos los años se hace una planificación en base a los datos poblacionales, y la cantidad de bebés nacidos vivos, para estimar la cantidad de vacunas que se van a requerir para el año siguiente”, sostuvo Niz.

El jefe del PAI provincial remarcó que trabajan en coordinación “con todo el sistema, también con el Registro Federal de Vacunación Nominalizado -Nomivac- que es el registro único de todos los tipos de vacunas, tanto las que entrega el PAI, como también aquellas que son compradas por las distintas jurisdicciones”.